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Gran Bretaña - 15/06/04
ROYAL ASCOT: COVENTRY ST.
El del 2004 es el último Royal Ascot antes de la remodelación del hipódromo
Crónicas PREVIAS de esta semana (PREVIEWS)  THE RED LINE: (R) ICEMAN RED-HOT IN OPENER (photo) Por CFGD
La cita más importante del turf mundial comienza este martes en Inglaterra, en el Real hipódromo de Ascot, a tiro de piedra del Castillo de Windsor –que lleva el nombre del pueblo cercano-, una de las residencias de la soberana británica. Obvio que hablamos del ROYAL ASCOT.
Una edición del Royal Ascot, la de 2004, que será especialmente resaltada por la historia como la última celebrada antes de la remodelación del hipódromo que se va a acometer y que es de tal envergadura que impide la existencia de un Royal Ascot 2005 en Ascot, ya que el meeting será trasladado al hipódromo de York, escogido entre varios otros como escenario más propicio de tan regio acontecimiento y que será denominado oficialmente como “Royal Ascot en York”. Será pues la primera vez que Ascot cierre desde que, en Agosto de 1711, se celebrara la primera carrera en un recinto que, pese a ser propiedad de la Corona Inglesa queda para uso como hipódromo público, desde que en 1813 el Parlamento inglés así lo estipulara.
El Royal Ascot es una reunión de cinco días consecutivos de carreras “flan and fast”, de la más alta calidad que pueda encontrarse en el Orbe en esta época del año, con diez y seis pruebas de Grupo –un Grupo 1 al menos cada día-, aderezadas con Listed Races y con unos hándicaps antológicos en los que pueden competir hasta treinta y dos caballos juntos, un espectáculo de una plástica incomparable. Cerca de tres millones de libras se distribuyen entre todas las carreras programadas que quedan abiertas a todo de tipo de purasangres, de cualquier edad, sexo y aptitud a una u otra distancia. De los 1000 metros a los 4000 hay oportunidades para todos, destacando que es en el Royal Ascot dónde la generación precoz comienza a despuntar, en lo que al nivel de los escogidos se refiere.
Paradigma de la unión de la historia y la tradición con los modernos modos de vida, mezcolanza antitética de formas y hábitos arcaicos con elementos de la más alta tecnología, el Royal Ascot consigue formar con todo ello un conjunto armónico, en cuyo telón de fondo, regio, pululan trescientas mil personas –a lo largo de los cinco días-, variopinta miscelánea de todas las clases sociales, razas y sexos que, a tono con la ocasión, visten sus mejores galas. Ascot es, para los no turfistas, sinónimo de glamour, sofisticación, moda atrevida, lujo y, sobre todo, de sombreros, aderezo obligado en algún recinto del hipódromo que es costumbre extender a aquellos lugares en que no resulta obligatorio, tanta es su tradición. Todo ello, no sería otra cosa que materia de publicación de las que llaman erróneamente “rosas”, si no fuera considerado como lo que es en realidad: el plato –de vajilla más o menos fina- en el que se sirve el Jabugo, el foie o el caviar, por citar algunos de los alimentos más codiciados y exclusivos. Un escenario fastuoso para el mayor espectáculo del mundo: el turf.
El Royal Ascot 2004 va a comenzar con un inmejorable pie, al disolverse –ahora puede decirse- la siniestra sombra de la huelga de los mozos de salida, planteada muy seriamente para la totalidad del meeting, tras el acuerdo alcanzado por las partes el pasado viernes. El ejemplo de lo sucedido en Epsom, con ocasión del Temple Stakes, impedía con seguridad el sueño a los organizadores de este Royal Ascot que asistían impotentes a un casi inevitable ridículo mundial, con la pérdida de prestigio que para el meeting se infiriera. Cierto que la simple idea de hacer partir con cintas a los dos años o a los integrantes de las pruebas de velocidad y de los mega handicaps, hacía encanecer el cabello de cualquiera, lo que ha dado lugar a que las partes se pusieran de acuerdo a como diera lugar. Excelente noticia para todos, acogida con entusiasmo por la mayoría.
Entremos pues en harina. Seis son las carreras programadas para este martes, primer día del meeting, con cuatro carreras de Grupo –dos de G2, dos de G1-, una Listed y un handicap, que comienzan con el G2 Coventry Stakes, prueba reservada a la generación precoz, ascendida este año de categoría, que se corre sobre 1200 metros y está dotada con £70000.
Catorce eran los partants previstos pero quedarán en el “número del Diablo”, por retirada de uno de los dos O´Brien de la carrera, RUSSIAN BLUE, con un absceso en un pie, lo que dificulta que el irlandés mantenga el extraordinario registro que tiene en esta prueba, con cuatro victorias en las últimas siete ediciones. Los trece han corrido previamente, doce de ellos han logrado al menos una victoria y cinco están imbatidos, con una sola salida. Por sabido se calla que las pruebas de dos años son un indescifrable misterio y mucho más las que, como este Coventry, ponen en liza elementos escasamente contrastados, sobre cuyo comportamiento nadie sabe nada. Bueno, nadie, no. Los bookies siempre parecen estar al cabo de la calle de casi todo, motivo muy poderoso para tomar sus cotizaciones como punto de referencia, y así tener al menos una idea de lo que se va a cocer en la pista. Y esas cotizaciones –que serán tanto más fiables cuánto más cerca esté la carrera- abren un abanico de cinco potros con mayor probabilidad teórica que el resto: TURNKEY, ORATORIO, ICEMAN, COUNCIL MEMBER y TONY JAMES.
TURNKEY –un Pivotal del Sheikh Mohammed, entrenado por M. Channon- cuenta con la desventaja de salir por el cajón número catorce, pero ha gustado en sus dos salidas, principalmente en la última, una Maiden D en la que laminaba a sus oponentes, aunque se producía en terreno muy pesado. Cabe dudar pues si la condición del terreno es o no determinante para su rendimiento ya que, de ser así, no habría de encontrarse nada a gusto en la pista de Ascot que se espera, se encuentre de bueno a firme.
ORATORIO es el O´Brien que le queda en carrera para que continuar con la buena racha que viene teniendo en esta prueba. Este Danehill nieto de Vaguely Noble, ganaba su maiden en terreno rápido en el Curragh, pero el posterior fracaso de los que entonces quedaban segundo y tercero, indica que deberá mejorar para imponerse aquí.
ICEMAN es una de las bazas más sólidas del lote, demostrando mejoría en su segunda salida en la que ganaba una maiden D, forma confirmada por los que entonces terminaban en segunda y séptima posición. Hijo de Polar Falcon y nieto de Exit To Nowhere, es propiedad del Chevely Park Stud y será conducido por Fallon.
COUNCIL MEMBER es el Godolphin de guardia, ganador en su única salida de una carrerita en Newcastle sobre 1000 metros (el sexto en esa prueba ganaba el domingo pasado en Kempton) y al que puede beneficiar el aumento de distancia, ha sido el escogido entre tres inscritos para representar aquí a sus colores, dato bastante significativo, como también lo es el precio que costaba de yearling: $800.000, aunque a menudo esto no quiera decir gran cosa.
TONY JAMES es el que vamos a preferir. Hijo de Xaar y nieto de Green Tune, pertenece a la preparación de Brittain e irá montado por Holland. Cuenta con una victoria –su única salida- en una maiden C en la que batía a tres potros que habían ganado previamente, mostrando mucho oficio y seriedad. Creemos que debe estar en la llegada.
Citaremos para concluir, como outsider, al pupilo de R. Hannon, KINGS QUAY, que está muy bien considerado en una cuadra en la que los dos años suelen comportarse especialmente bien y que, pese a ganar una carrera sin importancia, lo hacía con buen estilo, sobre un metraje que le resultaba escaso. Aquí, los 200 metros más van a beneficiarle no poco.
Nuestro pronóstico: TONY JAMES- KINGS QUAY Crónicas PREVIAS de esta semana (PREVIEWS)
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