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Francia - 14/10/03
Una ESTRELLA que sigue subiendo
En una tarde inspirada, Peslier lleva al club de los Grupo 1 a ETOILE MONTANTE
Por CFGD El pasado domingo se podía asistir en Longchamp al bello espectáculo proporcionado por uno de los mejores jockeys del mundo, Olivier Peslier que, en tarde inspirada, lograba la victoria en cinco carreras, obteniendo el segundo puesto en las tres restantes de las ocho programadas, incluyendo el G1 P. de La Forêt, en el que se imponía con ETOILE MONTANTE. No era esta la única ocasión en que Olivier Peslier –cuatro veces cabeza de lista de los jockeys franceses- había logrado una “manita”: previamente, el 24 de noviembre de 1995, había ganado cinco carreras en Evry, entre ellas, con el caballo de la Reina de Inglaterra, SHARP PROD y, hace dos años, en Deauville, compartiendo el éxito con el entrenador Fabre, responsable de los cinco ganadores. No estaba Olivier Peslier en los últimos tiempos tratado como se merece, si no a las claras, sí de forma subliminal y sobreentendida: se le cuestionaba todo -incluyendo esa “manía” de ir cada año a montar a Japón-, se establecían comparaciones y supremacías -sujetas ambas a la subjetividad de cada cual-, se han vertido incluso opiniones referentes a su vida privada y a sus decisiones profesionales, todo ello bajo la sombra alargada de una promesa belga que se hacía realidad, la de Soumillon. El “A Rey muerto, Rey puesto” que tanto agrada a los envidiosos, primaba y eso sin que el Rey hubiera exhalado el último suspiro. Cinco victorias y tres segundos de ocho montas silencian cualquier lengua por muy sucia que ésta sea y ponen las cosas en su lugar. Peslier sigue siendo Peslier y nunca ha dejado de serlo. No iba a dejar de tener influencia en la victoria de ETOILE MONTANTE –por más que el papel la proclamara clara favorita- la monta que le realizaba Peslier porque, a pocos metros de la llegada, un sorprendente ROYAL MILLENIUM pasaba a ETOILE MONTANTE como un obús justo en el momento en que el francés iba a lanzar a su yegua, al ceder INTERCONTINENTAL. Con ese instinto, inspiración y genio que sólo los escogidos ostentan, Peslier decidió dejar pasar al inglés para sacar a su yegua más al exterior y aplicar su excelente punta de velocidad en los últimos 300 metros, una punta de velocidad que le llevaría a alzarse con la victoria, cuerpo y medio delante del de Channon. Tercero, viniendo de finales, a la misma distancia, SARATAN y cuarta, INTERCONTINENTAL, a tres cuartos de cuerpo. Digamos que había conducido MOUNT ABU y que, a la entrada de la recta, parecía en condiciones de revalidar el La Forêt que lograra dos temporadas atrás, pero los años traen –junto a los achaques- manías y, el de Gosden, al oír el fragor de los que estaban a punto de presentarle batalla, levantó la cabeza y, mostrando total desidia por la labor, decidió que galopara su abuela. Excelentemente presentada por Mme. Head –que obtenía su quinto La Forêt en las últimas veinte ediciones-, ETOILE MONTANTE sumaba otro Grupo 1 al casillero de Khakid Abdulla que se merece todo lo bueno que le pase. Cierto que la yegua iba a favor de terreno -pues se desenvuelve muy bien en estas condiciones- y que disfrutó de una monta excepcional, pero nadie puede restar méritos a su performance que rompe así la sucesión de colocaciones en pruebas de G1, adjudicándose el primero de su vida que nadie sabe si será el último hasta que el propietario decida si la deja a cuatro años en entrenamiento o no. INTERCONTINENTAL circuló en posiciones avanzadas durante todo el recorrido pero no estaba el piso como para pretender que rematara con la velocidad que la caracteriza. Digna hermana de Banks Hill, se muestra muy incómoda en superficies mojadas. Casi prefiero ni comentar la carrera de ROYAL MILLENIUM por lo alejada que estaba de lo que el papel le señalaba a la vista de sus últimas actuaciones. Me jugaría incluso algo a que, a estas horas, aún están sus responsables pellizcándose tras la por ellos mismos denominada “carrera de su vida”. Confieso estar siguiendo a este caballo desde que terminara último del Tote Internacional en Ascot, a finales de julio, un hándicap B sobre 1400 metros en el que le persiguió la desgracia. Ha seguido participando en ese tipo de carreras -con un paréntesis en el G3 Park Stakes-, sin terminar de redondear sus actuaciones, empeorando incluso en su última salida, el Tote Trifecta Stakes, a finales de septiembre, también en Ascot. Y ese mismo caballo era el que enfilaba la recta de Longchamp el pasado domingo en un Grupo 1 con marchamo de ganador, logrando una segunda plaza pasmosa. Por no ser maliciosa, tal resultado me mueve a pensar que el Prix de la Forêt 2003 no era todo lo selectivo que de un Grupo 1 se puede esperar.
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