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Méjico - 10/04/02
Maria Felix, propietaria de clásicos
La popular actriz mejicana fallece a los 88 años
Por RGA
Parece que estos primeros meses del año 2002 no están siendo nada propicios para algunos de los personajes que a lo largo del pasado siglo XX han estado vinculados, de una u otra forma, con el mundo del turf.
Si hace unos días era la Reina Madre quien fallecía a la longeva edad de 101 años, menos de una semana después se ha conocido la noticia del fallecimiento de la actriz mejicana Maria Félix Berger, más conocida en su país como La Doña.
Actriz de singular carácter,  de mirada fría y desafiante, que fue una de las bellezas de su tiempo, moría en la noche de ayer cuando dormía en su casa de DF a escasas horas de cumplir los 88 años. Protagonista de un total de 48 películas, siempre se negó a aprender ingles, lo que le privó de alcanzar la gloria en Hollywood, no siendo ello óbice para que fuera una conocida actriz en el mundo entero gracias a películas con French Can-Can, La Bella Otero, Mare Nostrum, Sonata de Estío, Enamorada, Una Mujer Cualquiera o Que Dios me Perdone, dando su última actuación para la gran pantalla, en una película del director Bardem llamada La Bruja Blanca, de hace más de 18 años tras la cual se retiró definitivamente del mundo del cine.
De vida atribulada, pasó por cinco matrimonios y la muerte de su único hijo, habiendo manifestado hace no mucho en el madrileño Hotel Ritz que “La vida me lo ha dado todo, todo, pero también me ha quitado mucho como fue la pérdida de mi hijo Enrique”.
Y cierto que la vida le dio todo,  tanto que incluso durante su etapa de propietaria de caballos de carreras se consolidó como una propietaria de éxito bajo los auspicios del entrenador Francoise Boutin con quien la actriz mejicana siempre tuvo una buen número de caballos en entrenamiento en Francia.
A pesar de su frialdad son bien conocidos sus arrebatos de “cariño” hacia el jockey Lester Piggott tras algunas de sus victorias más sonadas en el turf francés, a quien besada sin parar una vez este había desmontado del ganador en lo que se habría comentado en aquella época con envidia e incredulidad. Siendo importantes algunas de las victorias de sus pupilos en las carreras francesas, el culmen de su vida como propietaria llegaría en el Irish Derby del año 1976 de la mano de un castaño de nombre Malacate.
Corría el último fin de semana del mes de junio de 1976 cuando en los cajones de salidas del hipódromo de The Curragh se alinearon un total de diecisiete corredores entre los que partía como máximo candidato a la victoria Empery (por Vaguely Noble), el reciente ganador en Epsom que, con la monta de Piggott, intentaría hacer doblete para los colores del magnate Nelson Bunker Hunt. Junto a éste, en funciones de pacemaker, estaría Oilfield, quien ya venía de ejercer esas mismas funciones con el ganador del Jockey Club Francés, Youth, así como Malacate, un ganador de tres carreras en Francia que venía de estar tercero de Youth en la clásica francesa. También en los cajones de salida estaba Far North, un ¾ hermano de Nijinsky que no había conseguido recuperar el buen valor demostrado a dos años, así como No Turning, un séptimo en Epsom con nulas opciones en The Curragh.
En ese mismo Derby montó por primera vez una amazona, y también por primera vez hubo una entrenadora profesional que ensillaba a su primer corredor en un Derby. Todo un año de revolución y cambio aquel de 1976.
Con Empery algo más nervioso y sudado en el paddock, los corredores se dirigieron a los cajones de salida donde, tras la largada, fue Oilfield quien tomó el mando de la carrera, seguido por Empery, King Mousse y Malacate montado por Paquet, que tenía orden de estar lo mas cerca posible de Empery. Este orden se mantuvo imperturbable hasta que el pelotón llegó a la última curva, momento aprovechado por Alain Lequeux, el jockey de Oildfield, para sacar a su montura de los palos y así dejar el campo libre a Empery a quien Piggott lanzó camino a la victoria seguido por Malacate, mientras que Nothern Treasure y No Turning intentaban hacer lo propio por el exterior. Poco después de que Empery intentara distanciarse, el hijo de Vaguely Noble se venció hacia fuera, dando señales de no ir cómodo en cabeza, mientras que Malacate estaba justo detrás, soplándole la oreja e imponiendo una dura presión a la montura de Piggott, de tal forma que llegados a los últimos cuatrocientos metros, Paquet lanzó a Malacate hacia la victoria pasando como una exhalación a Empery para adjudicarse la victoria por dos cuerpo y medio y tan cómodo que el hijo de Lucky Debonair terminó con las orejas tiesas y sin mostrar señal alguna de fatiga.
Tras a victoria, Maria Félix, la feliz propietaria del ganador, vistiendo un traje pantalón de color melocotón de Chanel, se mostró mucho mas comedida que en otras ocasiones, no pudiendo atender a los periodistas acreditados en la tradicional rueda de prensa posterior a la victoria, debido a su nulo inglés, un idioma que, como ya hemos comentado, siempre se negó a aprender, debiendo limitarse los reporteros allí acreditados a glosar las excelencias de su carrera cinematográfica por la que era tildada como la Brigitte Bardot mejicana.
Pocos años antes, Maria Félix se había establecido en París donde mostró una gran interés por el mundo de las carreras en el que, todo sea dicho, tuvo una suerte increíble puesto que a esta victoria de Malacate en el Derby Irlandés le había precedido la victorias de Nonoalco en las 2000 Guineas y la de Caracolero en el Jockey Club aunque este no pudo pasar de una tercera plaza en The Curragh, habiendo sido vengado ese año 1976 por el ganador Malacate, un caballo de difícil carácter que poco después de la carrera daba muestras de su mal genio tras golpear a su mozo y quedar suelto en el paddock de ganadores, siendo sujetado in extremis por Jim Marsh quien evitó ver a todo un ganador del Derby irlandés dándose una soberana galopada por los prados que circundan en hipódromo irlandés.
Malacate era un castaño por Lucky Debonair y Eye Shadow, por My Babu, criado por Beaconsfield Farm en Kentucky y que había sido adquirido por el agente George Blackwell en 40.000 dólares para la actriz mejicana en las ventas de yearlings de Kentucky donde, en años anteriores, ese mismo agente se había hecho para esta misma propietaria con los ganadores clásicos Nonoalco y Caracolero.
Tras esta victoria, Malacate fue adquirido por el Capitán Rogers, propietario de Airlie Stud, donde fue estabulado con tan mala suerte que se mostró infértil siendo devuelto a las pistas donde al año siguiente fue ganador del Prix Foy aunque no se colocara en el Arco, Champion ni en la Benson & Edges Gold Cup, siendo de nuevo retirado a Airlie para más tarde tomar rumbo al Japón. En España Malacate es conocido por El Muñeco (Malacate y Principia).
A esta sonada victoria hay que añadir las de Nonoalco (por Nearctic y Seximee por Hasty Road), un americano adquirido en las ventas de yearlings de Kentucky para la actriz mejicana con cuyos colores se embolsó el Prix Morny G1, Prix Salamandre G1, 2000 Guineas G1 y Jacques le Marois G1, siendo también adquirido por el propietario de Airlie desde donde, tras varias temporadas sin resultados demasiado alentadores, también fue exportado al Japón, siendo conocido en España por Nicandra (hija de Busaca, propiedad de la Yda. Pereira).
El tercero de los ganadores clásicos que fueron propiedad de Maria Félix Berger fue Caracolero, un alazán por Graustark y Betty Loraine, por Prince John (perteneciente a la misma familia de ganadores como Secreto, Crowned Prince, Majestic Prince, Allied Forces, Real Quiet o Hippodamia), quien ganó el Derby francés en 1974.
Caracolero hizo la monta en Europa por algún tiempo, siendo más tarde enviado a USA donde su producción no fue tan buena como se esperaba, siendo conocido en España por Barsa (hija de Dolceacqua y madre de Taquillera –por Hawaii-), a Davao (yegua de cría para la Yda. Puerto Rico), Miss Cara (yegua de cría en España), Palis Odi (yegua de cría en la Yda, Militar).
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