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Francia - 14/10/01
La Forêt, entre la velocidad y la milla
Significación de la carrera y referencia a los participantes de esta edición
César Guedeja-Marrón de Onís El Prix de la Forêt se corre en el hipódromo parisino de Longchamp, una semana después de haberse celebrado el meeting del Arco, no tan brillante como en otras ediciones, y a buen seguro sin tanto público presente, por mucho que tampoco se batiera el record de asistencia al punto clave de la temporada de otoño, probablemente por la situación que el planeta vive. Son 1.400 metros los que deben hacer los participantes en el último grupo 1, exceptuados los que para potros de dos años están programados, de los de verdadero prestigio que queda en el calendario francés, despejados ya todos en el 2001. Se dirá que la distancia es atípica y que los campos de los años recientes no comprendieron los mejores milers y, tampoco, los mejores sprinters. Lo que no es sino una obviedad pues lógicamente, dada la especialización dominante, han de ser los verdaderos maestros de los 1.400 metros los que presenten su opción. Sin que esta apreciación excluya la candidatura de milers “acortados” o velocistas “alargados”. La condiciones de la carrera son clásicas en cuanto a igualdad de peso por edad y distancia en este momento del año. 57 kilos cargan los tres años y los viejos 58. Las hembras gozan del kilo y medio de rigor de descargo La dotación alcanza 500.000 francos para el ganador y las asignaciones de consolación son, según el orden de llegada respectivo, de 200.000, 100.000, 50.000 y 25.000. La historia del premio tiene nombres muy ilustres en su relación. Para los nostálgicos de la chaquetilla de A. Blasco, Pharly (Lyphard), el pequeño alazán musculoso, redondo y con más clase que un Nureyev de los buenos, ganó tan prestigiosa carrera, con mérito añadido por su condición de miler capaz, por otra parte, de ganar el Lupin sobre 2.100 metros. Versatilidad se llama esa aptitud. Más modernamente, los especialistas mandan en la lista. Danseuse du Soir (Thatching), Dolphin Street (Bluebird), Wolfhound (Nureyev), Occupandiste (Kaldoun), Tomba( Efisio ), Field of Hope (Selkirk), Indian Lodge (Garnd Lodge) son clarísimos ejemplos. Tampoco eran mucho más fondistas Bigstone ( Lasy Tycoon) o Septième Ciel (Seattle Slew). Quiero recordar aquí las dos últimas ediciones como homenaje a Guillot , el jockey de Field of Hope, que hizo una preciosa monta de espera , “peinando” en el poste a sus adversarios, con clase y sentido del paso, y a Patricio Eddery, uno de los jinetes de mi predilección de todos los tiempos que he conocido, realizando una muy bonita carrera en cabeza con Indian Lodge. Ambos serán ya poco o nada vistos en pista. El primero, en primera juventud por una lesión de espalda, y el irlandés por los malditos años que todo arruinan . Esos que los idiotas se empeñan en proclamar que no importan, que la verdadera edad se lleva en el espíritu.. En el 2001, el campo está compuesto por los siguientes elementos, 11 en total de los que hay 8 viejos, uno de ellos castrado, y dos hembras de tres años: Deep Sleep (Rahy y Night and Dreams por Fappiano ), montado por Peslier y entrenado por Fabre, es el ganador del g.3 Seine et Oise. Fue antes quinto del St Georges, también de esa categoría. Un sprinter con origen para hacer algunos metros más. Warningford (Warning y Bardford Lady por Stanford), conducido por Fallon y preparado por Fanshawe, llegó cuarto del reciente Moulin de Longchamp. Ha sido también ganador de un grupo 3 en Newmarket, 2º del Lockinge St, g1, en Newbury y 3º de otra prueba de grupo tres en ese mismo hipódromo. El Gran Lode (Lode y La Pastoral por Cinco Grande), un argentino en París, sin grandes performances ni en su país durante 1999 ni posteriormente en Suecia e Inglaterra. En el país de escandinavo, este año, fue segundo de la Polar Sprint Cup, ha ganado un grupo tres y no se colocó en la Baltic Cup, de igual categoría. Mount Abu (Foxhunter y Twany Angel por Double Form), bajo preparación Gosden y con el enérgico Fortune en la silla, tiene una gran actuación en la Haydock Sprint Cup, donde fue segundo. No así en el Diomed St o en la July Cup pues no se colocó en ninguna de las dos. China Visit (Red Ransom y Furajet por The Minstrel), con la monta de Spencer, entrenado por S. Bin Suroor, es el más que reciente ganador de un Rond Point no muy lucido, hace exactamente ocho días. Antes, llegó segundo de un grupo tres en Doncaster y siempre se colocó en el año, si bien es cierto que comenzó temporada en tres carreras de Nad Al Sheba. Waquaad (Green Desert y Hamaya por Mr. Prospector), con E. Nordling por jinete y bajo preparación G. Nordling, es otra participación pintoresca. Su trayectoria en cuanto a actuaciones del 2001 es casi idéntica a la de El Gran Lode, con más éxito en este caso, pues ganó la Baltic Cup. Nicobar (Indian Ridge y Duchess of Alba por Belmez), que tendrá como jockey a Dwyer y está entrenado por Balding, es ganador de un grupo 2 en Sandown y del Emilio Turatti antes de fracasar en el Diomed St. y en la Celebration Mile de Goodwood. Mull of Kintyre (Danzig y Retrospective por Easy Goer), bajo la monta de Darley y preparado por O’Brien, es cuarto en la Haydock Sprint Cup (1.200 metros) tras conseguir el tercer puesto del Lennox St. en Goodwood sobre 1.400 y ser segundo de otro grupo tres, esta vez en Irlanda. Greengroom, tres años por Green Tune y Danagroom por Groom Dancer, de la preparación Laffón-Parias, conducido por Thulliez, llegó tercero en el reciente Prix du Pin que gana Amonita, tras su larga ausencia de las pistas (desde la Poule). Antes ganó el Djebel. Lethals Lady (Rudimentary y Madyla por Darshaan ), montada por Boeuf y entrenada por Collet, es una potra de tres años que fue séptima del Moulin. Durante toda la temporada ha estado en compromisos importantes sin alcanzar el éxito total pero colocándose en la Poule, el Sandringham, el Astarté y el Coronation St., al menos en los puestos remunerados. Apunta claramente a hacer un buen papel antes, tal vez, de retirarse a la yeguada. Amonita (Anabaa y Spectacular Joke por Spectacular Bid), de la preparación Bary, con su compañero habitual Jarnet, es también posible que dispute la última carrera de su vida, tras recuperar moral, después de derrotas sin cuento en grandes eventos de la milla de toda la temporada, en el Prix du Pin, el J. Le Marois, el d’Astarté o la Poule fueron demasiado para ella. Pero tal vez aquí logre el colofón rehabilitador de su carrera decepcionante pues no en vano ganó, a dos años, el Marcel Boussac, g.1. El Prix de la Forêt queda así, en mi opinión, abierto, bonito y atractivo. Si hay que decantarse, los especialistas de la distancia se llevan mi atención, comenzando por Mull of Kintyre, con Mount Abu y las dos hembras a continuación, por delante de los milers (China Visit está evidentemente en forma pero baja metros en pocos días, a Warningford le pasa siempre algo que le ciega la victoria y Nicobar y Grengroom tienen alguna laguna de nivel , al menos hoy por hoy). Los “nórdicos” deben demostrar una valía hasta hoy pura incógnita. Y no queda más que Deep Sleep, un sprinter al que la magia de Fabre y la monta (esperamos que mucho mejor que su gran y lamentable fallo del Boussac, donde se dejó “robar” la cartera por Dettori) intentarán poner en lugares de honor. Veremos si lo consiguen. Esperemos que todos nos divirtamos con tan interesante carrera.
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