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La confirmación de fiebre aftosa en Francia, explica claramente lo contagioso de la enfermedad y va a implicar medidas muy restrictivas que van a afectar al deporte ecuestre.
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Cría y salud - 14/03/01
Fiebre aftosa en Francia, ¿qué va a pasar con los caballos?
En Francia se han confirmado casos, lo que lógicamente va a influir en el panorama ecuestre europeo
El pasado lunes 12 de marzo se confirmaron casos de fiebre aftosa en Francia. Hasta el momento sólo habían existido animales con síntomas de la enfermedad que luego quedó descartada analíticamente.
En Mayenne (norte de Francia) se ha comprobado que 6 bovinos tenían la enfermedad. Los 118 animales de esta explotación fueron inmediatamente incinerados. Esta explotación ganadera de Mayenne está cercana a otra en la cual había ovinos importados de Gran Bretaña en febrero.
Esta mala noticia fue comunicada por el ministro francés de Agricultura Jean Glavany, quien añadió que no se podía descartar la aparición de nuevos casos, dada la gran contagiosidad del virus. Pues bien, parece que fue una premonición pues a las pocas horas la Prefactura de Seine-et-Mare (París) anunciaba que tres bovinos habían dado positivo a dicha enfermedad.
Lógicamente las precauciones francesas no se han hecho esperar y ya hay 18 explotaciones ganaderas sometidas a una vigilancia especial.
Las explotaciones presumiblemente infectadas tienen un perímetro de 3 km en el que está prohibido el tránsito de personas y en uno de 10 km se prohibe el tránsito de ganado y es necesaria la desinfección de los vehículos.
El Comité Permanente Veterinario Europeo ya ha bloqueado las exportaciones de animales franceses que pueden padecer esta enfermedad. Asimismo en Francia no se permite el envío de productos de las dos explotaciones que han confirmado la enfermedad a otros puntos del mismo país.
Todo hace pensar que las medidas van a ser cada vez más restrictivas en el lógico intento de acatar un virus tan contagioso. Hay que pensar que esta enfermedad se pensaba erradicada de la Comunidad Económica Europea desde 1991.
También se ha prohibido la importación de carne de Argentina pues se sabe que esta enfermedad existe en el país suramericano y además se da la particularidad que debido al “mal de las vacas locas” aumentaron las importaciones de carne argentina, que en restaurantes belgas se suministraba etiquetada de ecológica. Por otra parte hay que decir que en Estados Unidos, donde la enfermedad está erradicada desde 1929, está prohibida la importación de carne y derivados lácteos de la Comunidad Económica Europea, la misma medida que ha tomado Canadá.
Respecto a los caballos, está claro que las medidas de transporte y las concentraciones (ferias, concursos...) van a sufrir restrinciones. En Francia ya han sido suspendidos los concursos del próximo fin de semana (16-18).
Pero hay que tener en cuenta que el caballo, aunque no padece la enfermedad, si puede ser vehículo de transmisión del virus pero igualmente lo son las personas, cualquier tipo de material y por supuesto los vehículos. No es menos cierto que en Europa es fácil que los caballos estén cerca de otras explotaciones ganaderas, pero lo mismo debe pasar con otros animales como pollos, pavos, patos, conejos...
 En las personas que provienen de Gran Bretaña ya se establece un control mediante desinfección, pero ahora esto mismo se tendrá que hacer con todo lo que provenga del resto de Europa. Un país como España que de momento no tiene fiebre aftosa debe de ser el que tome las medidas de mayor precaución para que el virus no entre.
Todo hace pensar que el problema se va a alargar y ojalá que no aumente. Tal vez con los caballos, ya que no padecen la enfermedad, lo que haya que hacer es simplemente tomar medidas de desinfección para que no transporten el virus aunque estas medidas sean más complicadas que no dejarles movimientos.
En Holanda, y sirva como ejemplo, no han suspendido la Copa del Mundo de Hertogenbosch (23-25 de marzo) pero se tomarán grandes medidas desde el punto de vista de desinfección de caballos, transportes, impedimentas, alimentos , público...
En España, como bien se sabe ha quedado suspendida la Copa del Mundo en Oviedo, y esta suspensión, por qué vamos a ocultarlo ha inducido a comentarios suspicaces. La suspensión de un concurso de esta categoría en España, donde no existe la enfermedad, sólo puede estar motivado porque no se quisiera que entraran caballos de Europa en nuestro país, pero esto no debería de venir dado como comunicación FEI o de la organización sin más, sino que debería ser la medida cautelar fronteriza tomada por las autoridades. Algunos comentan que ya hace tiempo la organización de dicho concurso estaba en entredicho y la fiebre aftosa no ha hecho más que hacer bueno el refrán “a río revuelto ganancia de pescadores”. Quienes seguro que no tienen ninguna culpa son el Ayuntamiento de Oviedo y los dirigentes federativos asturianos pues bien sabida es la buenísima disposición de las autoridades asturianas a promover todo lo hípico permanentemente.
En Montenmedio ayer la organización se reunió con los jinetes para expresarles su deseo de dar facilidades, incluso realizando competiciones, a aquellos que no puedan o no deseen volver a sus domicilios.
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