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- 17/06/23
El Derby del Rey Ausente
por Jesús de Miguel El Derby de Epsom 2023, su edición número 245, se disputó el sábado 3 de junio y el Rey de Inglaterra, Carlos III, coronado 28 días antes, no acudió al hipódromo a presenciarlo. Ni siquiera su esposa la Reina –que no reina consorte, que no duquesa de Edimburgo- que se ha dicho que va a dirigir la excelente cuadra y yeguada de la pareja, heredada con la corona. Ella acudió la víspera del Oaks a una visita a la Escuela de Aprendices de Newmarket, donde el periódico Racing Post confiaba en obtener la tan dilatada confirmación de si acudirían o no a la gran carrera. La forma de acabar su crónica correspondiente a la visita es demoledora: “El Racing Post entiende que no habrá representación Real en el mitin de dos días, que empieza hoy”. Desde Buckingham no se emitió ni un mísero comunicado.  El Derby de Epsom 1953, su edición número 175, se disputó el sábado 6 de junio y la Reina de Inglaterra, Isabel II, coronada 4 días antes, acudió emocionada a su balcón reservado en el Recinto Real. Participaba su propio caballo, Aureole, tercer favorito, que había vencido en la preparatoria de Lingfield. Ya el último trabajo preparatorio del purasangre, en la mañana de la mismísima coronación, había implicado una llamada de Isabel a los establos reales para interesarse por el ejercicio. No poseo el dato de si ella acudía al hipódromo de Epsom durante su infancia y adolescencia, pero dudo mucho que faltase teniendo en cuenta la cuadra de caballos de su abuelo y la enorme afición de su madre, pese a que ésta prefería las carreras de obstáculos (tiene un busto en el paddock de Cheltenham).  Lo que sí se ha publicado es que desde su ascenso al reinado no se perdió más que dos ediciones del Derby por sendos embarazos, algo que yo tiendo a poner en duda: Isabel de Windsor no era de las que juega con la fertilidad 40 semanas antes de primeros de junio, Incluso aceptando ese supuesto nos saldría una cuenta de unas 69 ediciones presenciadas en la pista por Lillibet… y eso que Aureole no ganó, fue segundo a cuatro cuerpos. Fernando Savater debe de estar muy cerca de llegar a las 50 ediciones contempladas in situ, aunque el filósofo donostiarra jamás ha tenido allí participante alguno. Tiempo queda.  El jockey Gordon Richards ganó 26 estadísticas inglesas de jinetes en sus 33 temporadas activo. En la última antes de retirarse aún no había vencido en el Derby de Epsom, en esa época mucho más que ahora un acontecimiento nacional tanto deportivo como social. En su última aparición en las colinas de Epsom, precisamente el año de Aureole, montó a Pinza y consiguió pasar la meta en primer lugar, borrando de su historial ese enorme “…, pero…” que siempre le habría acompañado. El Gordon Richards de la actualidad es Frankie Dettori, jockey italiano de estratosférica fama por su calidad y su simpatía y cercanía con la afición. Este año es el último que montará regularmente hasta su retirada a fin de año. El viernes 2 de junio del presente año llegó a Epsom con 52 años cumplidos y ya 2 victorias en el Derby en 2007 y 2015. ¿Ganaría uno cada 8 años, tocaría el 3º en 2023?  No estaba allí de convidado de piedra, o sólo para recibir ovaciones de vieja gloria. Todas sus montas principales del mitin tenían una primera opción de victoria, dado el extraordinario estado de forma en el que aún se encuentra. En la jornada de la víspera del Derby, con el Oaks y la Coronation Cup como excelentes pruebas teloneras, demostró que quiere salir de su profesión en lo más alto: ejecutó dos enormes montas de espera a Soul Sister y Emily Upjohn para adjudicarse brillantemente ambas pruebas. Su caballo en el Derby, Arrest, al que lógicamente la situación había llevado a bajar abruptamente su cotización en apuestas, no brilló en la recta final como si lo hicieron el ganador Auguste Rodin y el segundo, el sorprendente King of Steel. Pero no pensó Dettori que sus labores en Epsom habían terminado: montó en la tercera carrera a la favorita Prosperous Voyage y cosechó su última victoria en este legendario recinto en la que era su última monta en él. Epsom te despide con honores, Frankie. ¿Y los animalistas? La organización Animal Rising amenazó con movilizar a mil personas para impedir la disputa de la prueba, medida contrarrestada con una solicitud judicial especial que fue atendida y puesta en práctica en el recinto de carreras, finalmente limpio de personas durante la disputa de la prueba (sólo saltó uno y fue neutralizado a tiempo). Las intenciones de esta organización eran radicales, y su filosofía totalmente extrema, sugiriendo que esperan la desaparición de la raza del PSI, según ellos artificialmente creada para explotar a los animales… Con sus amenazas me han hecho reflexionar acerca de Emily Davison: también ella pensó que el Derby era el mejor lugar en el que exponer sus reivindicaciones, de la forma más explosiva… pero ella cambió el mundo para mejor, y dio su vida por ello cuando la mitad de la población humana no tenía personalidad política. Animal Rising tiene cauces para entablar el debate, y sus objetivos –si bien nobles en el fondo- se encuentran a un abismo de distancia de lo que pretendía la célebre y llorada sufragista. Afortunadamente, el mundo de 2023 dista mucho de aquel de 1913 y los Derby de ambos años tampoco se han parecido
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